Ya nada es lo que era; las cajas registradoras tampoco lo son. Piénsalo un poco. Hoy en día, cuando vamos a comprar ropa a un gran almacén y nos encontramos delante de la caja, además de pagar, podemos realizar una amplia variedad de gestiones. Por un lado, podemos abonar las compras con tarjeta de crédito, podemos averiguar si la prenda que queremos llevarnos está disponible en otra talla o si, por ejemplo, la tienen en stock en otro local. El empleado puede entregarnos esa información al momento y, además, comentarnos si tenemos algún tipo de descuento por los puntos acumulados en nuestra tarjeta de fidelización o si hay algún tipo de promoción especial vinculada a ella.
Efectivamente, la caja registradora ya no es lo uqe era, ahora es inteligente y tiene memoria.
Este avance se ha logrado no solo gracias al aparato o hardware, se debe sobre todo al software que lo acompaña. A esta combinación de aparato y software se le llama POS (punto de venta o terminal punto de venta) y el de Odoo supera con creces a la media en cuestión de inteligencia. Sus principales rasgos son la versatilidad y funcionalidad a la hora de manejarlo. No sólo se utiliza en una amplia variedad de industrias, además es compatible con cualquier hardware: computadoras, computadoras portátiles, tabletas y máquinas industriales. También con los escáneres de código de barras, muy útiles, por ejemplo, para procesar pedidos en el punto de venta con el consiguiente ahorro de tiempo para el empleado y el cliente.
Pero por lo que es realmente inteligente es por su capacidad para relacionar datos y permitir que fluyan de un extremo a otro de la empresa. Me explico: El POS de Odoo está totalmente integrado con los módulos de Inventario y Contabilidad, de manera que cada operación realizada activa de forma automática y en tiempo real los niveles de stock o queda registrada en la contabilidad de la empresa.
El POS funciona en sintonía con el resto de departamentos clave de la organización y las app detrás de ellos porque forma parte del ERP. Por tanto, también está integrado con el CRM, lo que permite, por ejemplo, identificar al cliente en el momento de la compra, y los cupones o descuentos que puedan estar asociados a él, directamente desde la app.
Además, cuando digo que tiene memoria es porque funciona online y offline. Es decir, el POS utilizado en la tienda de la que hablaba al principio de este blog seguirá funcionado aunque la conexión a Internet falle o esté suspendida durante un tiempo, y cuando se restablezca, los pagos realizados fuera de línea se sincronizarán con todo el sistema de forma automática.
Por otro
lado, un POS como este permitiría, por ejemplo, ejecutar las estadísticas en
tiempo real y realizar consolidaciones en todas las tiendas de una cadena de
grandes almacenes sin la molestia de tener que integrar varias apps
externas.
Pero aquí el tamaño no importa. Lo mismo vale para una cadena de grandes almacenes como para una tienda pequeña: se puede contratar el POS según las necesidades actuales de su empresa y hacer que escale según el ritmo y el camino que usted se imponga.
